CONOCE LA HISTORIA DEL MUSEO DEL SACAPUNTAS EN SAN CRISTÓBAL “EL MOTUVI DEL SACAPUNTAS ES EL LÁPIZ”
Una de sus frases que ilustra su colección es: “El motivo del sacapuntas es el lápiz.”
María Mencía Catalina Renville Santos nació en San Cristóbal, el 30 de diciembre de 1916, falleció en abril del 2013 a sus 96 años.
Miembro fundador y directivo del Patronato de Educación Especial de Rehabilitación en San Cristóbal, institución que en 1975 fundó una escuela para niños con problemas mentales. En la actualidad se encuentra en funcionamiento.
Fue maestra durante 10 años en la Escuela Juan Pablo Pina de esa localidad. De igual forma fue maestra fundadora del Instituto Politécnico Loyola donde paso a ser profesora desde 1952 (período de instalación) hasta 1982, lo que suma 30 años. Fue declarada hija destacada de San Cristóbal en el 2002 por la Gobernación de esta ciudad.
Todo inicio el 25 de marzo del 1959 en San Cristóbal, cuando la profesora Mencía recibió de manos de Dominicana Renville, su hermana menor, el primer sacapuntas con forma de brújula y de color amarillo.Este útil escolar costo unos $30 centavos; a partir de ese día la coleccionista despertó en la maestra.
Dedicó esta particular colección en honor a su vocación de maestra. En el 2010 expresó: “Colecciono sacapuntas como un homenaje a la educación, a los muchachos y muchachas que eduqué en San Cristóbal.” Una vitrina con varios compartimientos fue la pionera en engalanar la sala de las hermanas Renville.
Este mueble albergaba un sin número de sacapuntas que iba adquiriendo Mencía. Una vitrina no fue suficiente. Para 2013 ya eran diez escaparates, con alrededor de 2,000 sacapuntas.
Mencía conservaba sus sacapuntas organizados en la ‘salita’ de su hogar. Allí fue donde inició con su catálogo, donde plasmó cada detalle de sus queridas piezas ordenados de manera temática como frutas, de navidad, aves, pajaritos, patitos y niños, Las promociones de las marcas también tienen su espacio en esta colección. Los superhéroes no se quedan fuera, y los clásicos han encontrado un lugar. El carro de Batman, el chocolate Kiss, la botella de Coca-cola, la BMW, la botella de Pepsi, los corazones y diversos modelos de Barbies entre otros.
Sherezade, Iliana Emilia, Berenice, Karina y Desiree, sus queridas sobrinas, tomaron la iniciativa de mantener viva la pasión de coleccionista de su tía. Es así como deciden donar las vitrinas con todas las piezas de sacapuntas al instituto donde Mencía impartió clases durante 30 años ( Institución Politécnico Loyola). Actualmente poseen él mismo estado, y se encuentran en uno de los salones de la biblioteca San Francisco Javier. Este salón está ambientado cual si fuera la sala de la casa de la profesora Mencía.
El 18 de febrero del 2011, en el marco de la celebración del día del estudiante, esta colección fue declarada como Atractivo Cultural de la Provincia de San Cristóbal.